miércoles, 4 de febrero de 2009

-38. En sus marcas...

Maldita sea, hoy no podré correr porque hace rato que llueve y llueve. Vamos a ver, la última vez que fui a un gimnasio llegué con esta foto de Kate Moss y le dije al tipo: Quiero estar como ella. 


No sé qué habrá pensado en la vida real sobre mi sueño remoto pero en el mundo de los clientes y el dinero se aguantó la risa y me dijo, 'pst esta chica está bien flacaaa, tú ya estás así ¡hasta te pareceees!' Y miraba la foto impresa en papel bond de 90 gramos y me miraba a mí y me preguntó si tenía pensado irme a Europa a trabajar de modelo. Le dejé clarísimo que no necesitaba ni quería músculos hiperdesarrollados por ningún lado. Era tan bueno, fuerte, grandote... e ingenuo, me caía re bien, lástima que haya olvidado su nombre. Lástima que Kate y yo sólo compartíamos la mitad de un corte de pelo:


Porque la otra tenía un buen largo, ese corte es el más afortunado y mejor logrado de la historia de los cortes que le he pedido a mi peluquero vía dibujitos con instrucciones, :) ¡Oh, el metro! Cuando le mostré la pic a Salvatore lo primero que me dijo fue 'en el metro está prohibido sacar fotos', pero yo les juro que a mí nunca nadie jamás me ha dicho algo. Con esos pelos, sin esa ropa, todos los días entrenaba cerca de casa. Según mi instructor para tener el cuerpazo de Kate (que sólo en su mente no rockeaba) lo que tenía que hacer era esa cosa para la que yo estaba segura que no había nacido, esa actividad que exige un grado de coordinación motriz superior que yo jamás he tenido... correr. No sé correr, no puedo, dije. Y me rehusé a hacerlo siempre que pude, como nunca quise debía pasar 40 minutos caminando rapidísimo sobre la banda inclinada a tope antes de darle a las pesas, pocas porque como dije no quería bolas por ningún lado. Me sentía hamster castigado, no imaginaba a mi modelo favorita haciendo esos esfuerzos y sudando tan a chorros como yo, además, envidiaba mucho a Salvatore, que en la banda de a lado corría como un profesional, no se agitaba ni poquito y bajaba antes que yo. Sniff.

No fue él la primer persona que intentó hacerme correr, antes estuvieron todos mis maestros de educación física, mi prima Indira, mi papá y Salva, no sé si mi ex-ex, el otro Salva xD también lo hizo, (qué pésima memoria) me parecería raro que no porque cuando anduvimos él estaba en súper forma, patinaba un montón y me ponía a hacer abdominales, mmm, pero de lo otro no me acuerdo, ji. Cuando me mudé de casa -por sexta o séptima vez en mi vida o más- dejé de ir al gym y de hacer todo, aunque dos veces estuve muy cerca de parques grandes eso de salir a correr por la calle no se me ocurrió ni de chiste, porque además la contaminación del defe, el smog y esas cosas. Quise ver lo del gimnasio pero abrían después de las 6 a.m. y yo necesitaba ir a esa hora para que me diera tiempo.

No tengo alma de medallista olímpico pero me caga estar gorda y agitarme al menor esfuerzo o sentirme toda torpe, es triste. Llevaba casi dos años y medio sin hacer ejercicio, así nada de nada, mi último propósito de año nuevo era gastarme más de cien euros en ropa deportiva y en el estreno darme cuenta de que estoy fuera de forma total, je, en serio hubiera preferido las botas plateadas. Creo -con la mano en el corazón- que mis profes tienen casi toda la culpa de mi semi aversión a correr. Desde primero de primaria correr es una actividad castigo para niños desobedientes. ¡A correr!, sin más, a darle ochoscientas vueltas a la cancha de básquet, 'y no paren hasta que pite', pfff. Tanto repelús hacia correr me arruinó dos actividades importantes y queridas en mi vida, mis clases de tenis y teatro. Las primeras porque mi maestro no pretendía enseñarnos a tirar ni una bola hasta tener la condición física de un campeón y no de una escuicla cachetona de quince años. Al mes dejé de ir. Con teatro pasó casi lo mismo, debíamos correr entre las butacas, por las escaleras, sobre el escenario y así, las dejé, pero fue también porque el profe me aburría.

Hace dos semanas fui al Corte Inglés (por suerte en rebajas) a comprar unos tenis bien padres, un sujetador deportivo y unos leggins a juego para cuando sea verano, ya tenga un cuerpazo y pueda salir sólo con esas dos cosas, jajaja. Todo marca adidas, ¡wiii! Según google (no sé si maps o qué) corro cuatro kilómetros diarios, bueh, la verdad aun no los aguanto de un tirón, pero ya casi tú, ya casi.

Si Eneko no me hubiera obligado ya habría desistido porque es horrible no saber respirar, correr a un grado, asfixiarte, pasar una semana sin poder doblar las piernas, sentirte en cámara lenta cuando pasan junto a ti otros joggins, hacer drama a mitad de la carrera y gritar que ya no quieres nada, ni que te toquen, ni que te hablen y huir enojadísima con dolor de orejas agudo, je... soy una teatrera. Espero no dejarlo esta vez, ¡no! Ya me empieza a gustar, en serio. Antier Eneko no podía llegar antes de las ocho, a esa hora hace un friazo, así que me vestí, agarré las llaves, me enchufé al iPod y salí a correr sola, ¡aikaaa! :P Y me sentí muy bien, ¡oh! Casi igual de bien que el otro día cuando vi a una señora desarmarse mientras corría, ja, me dio un montón de risa, iba con Laura y recordamos a Phoebe de Friends, tan bruta xD









Trivia: ***Fotos***
a) Si yo llegué con la de Kate, ¿con cuál creen que llegó Salvatore? ;) 
b) ¿Quién era mi segunda opción impresa?

6 comentarios:

Anonymous Totò Lazzzarini ha dicho...

Sí, muy cierto, en esa época estabas muy flaquita, muy mucho caracoL! Te pasabas. También siempre extrañé ir al gym. Que bien que ahora te ves genial, aunque quiero aclarar que nunca te has visto mal. Acoto que te falta contar la historia del maratón de aguascalientes. Eso es ser rocker. ¿Recuerdas que me ataqué de risa de perplejidad? Tengo que volver al ejercicio, me urge porque tengo que llegar a mis 27 con garantías y en mejor forma física que nunca, la voy a romper ese año :)

5 de febrero de 2009, 7:16  
Anonymous whiskyconprozac ha dicho...

No mames, como me gusta este blog!!!!!!
Será que la obsesión por el corte del pelo es lo que marca nuestra generación... la de icomprendidos del peinado??
Todo el tiempo guardo imágenes de los cortes que me gustarían, pero para el gimnasio... no lo había pensado, aunque otra de las motivaciones que resultan bastante bien es ir a un gimnasio donde predominen las cincuentonas obesas... o por dios, esa presión psicológicoa del "yo no quiero estar así nunca ahora por eso le chingo el doble hoy", no sabes como funciona.
Un saludo
Saludos

5 de febrero de 2009, 13:03  
Anonymous Ana ha dicho...

A ver, acá va mi intento para resolver la trivia: a)Iggy Pop, jaja, no creo pero es el único a quien recuerdo haberle escuchado halagar los músculos.
b)Milla, por supuesto.
¿Atiné o qué?

5 de febrero de 2009, 20:57  
Anonymous aLe!barrera ha dicho...

intermission,
¿sabes que parece muy bien que aun me llames caracol? a tu salú contaré la historia del maratón hidrocálido. Un abrazo Salva. Hace tiempo que no me peso, el lunes lo haré en la farmacia.

whiskyconprozac,
siempre creí que el problema de los peluqueros era su falta de arrojo hasta que conocí a Robin, el último gay que me destrozara el pelo, quien se creía artista entre otras. Grrr... aun le guardo rencor. Por eso opté por los esquemas, claro, pa'la idea general, no lo quiero todo exacto exacto xD Toda esa incompresión es la que me ha hecho evitar al máximo los cortes de pelo aquí en España, he ido una vez y otra me despuntó una amiga. Mi pelo ahora está todo asilvestrado y aburridón :P

Correr es bien bonito pero si pudiera también haría gimnasio, jajaja, justo por lo que dices, era divertido ver a las gordas y correr a todo para escapar de ese futuro aterrador :P

Saludos Gina, a mi me gusta un chingo tu blog, soy una fan de clóset. Bueno, ahora ya no :D

Ana,
Iggy tiene mucho cuerpo, Salva quería ser Bowie... y lo hubiera sido pero faltó droga y sobró comida, yo creo, mejor que no :P Es que estar como él en los setentas es complicado. Anaaa, por siempre Milla, es que es TAN bonita. Sigues viva, :) ¡Qué gustooo!
Abrazooos.

7 de febrero de 2009, 14:12  
Anonymous Talisman ha dicho...

jaja me dio muchísima risa el video donde Phoebe corre. Te ves bonita en la foto, se te ve bien el pelo corto.

Yo también amo a Kate Moss, casi tanto como Zemmoa la ama. Me choca correr, pero creo que tendré que emepezar a hacerlo porque mis piernas están tan pero tan gordas, y ya me harté de que mis pantalones no me queden ja! Estoy haciendo pilates (según yo) por la mañana para bajar la panza :P

Suerte con la corrida!

P.D. Yo te sigo viendo muy flaquita.

10 de febrero de 2009, 9:23  
Anonymous aLe!barrera ha dicho...

tali ah!,
jajajaja, es que lo de phoebe es increíble xDDD a mí me dolió la panza de la risa :P

Un verano que estuve caminando mucho y haciendo bicicleta (como 40 minutos al día) me dijo una amiga que las piernas me habían adelgazado un montón, así que yo creo que sí funciona :D

En tu versión 'toda de amarillo' te ves súper bien ;)

Y ahora, me visto que es hora de salir :P A correeeeer. Saludos Thalía :)

10 de febrero de 2009, 10:16  

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